Continúan la ola de violencia en el mundo y los ataques armados a la ciudadanía, después de las masacres en Buffalo, Texas y New York ahora suscitó en una zona concurrida de Filadelfia.
Múltiples tiradores abrieron fuego en la concurrida zona de South Street de Filadelfia, que cuenta con múltiples bares y restaurantes, alrededor de la medianoche del sábado. Hasta el momento la cifra de personas lesionadas es de por lo menos 11 heridos y 3 fallecidos. Un video de vigilancia muestra a la gente corriendo en pánico en una calle en los últimos momentos de la grabación de 22 segundos, presumiblemente después de los disparos.
El incidente se produjo tras los recientes tiroteos en una tienda de comestibles de Buffalo, Nueva York, en una escuela primaria de Uvalde, Texas, y en un edificio médico de Tulsa, Oklahoma, que dejaron decenas de muertos. En lo que va del año se han producido al menos 239 tiroteos masivos en Estados Unidos.
Una cifra alarmante que causa conmoción en la gente haciendo que comiencen a movilizarse para exigir un mayor control en la adquisición y utilización de las armas en el país americano. Una amplia mayoría de los votantes estadounidenses, tanto republicanos como demócratas, está a favor de leyes de control de armas más estrictas, pero los republicanos en el Congreso y algunos demócratas moderados han bloqueado esa legislación durante años.
Por otro lado, las masacres no paran aquí, también en Nigeria muy lamentablemente atacaron una iglesia católica llena de feligreses que solo celebraban sus creencias, dando gracias y alabando a su Dios.
Al menos 50 personas fueron asesinadas entre ellas niños inocentes, en el ataque llevado a cabo por hombres armados en plena misa de Pentecostés en la iglesia de San Francisco Javier, en el estado sureño de Ondo. Según los testigos, un grupo de cinco personas comenzó a disparar de modo indiscriminado tanto dentro del templo como en los alrededores, y explosionó una bomba, antes de secuestrar al sacerdote celebrante y a un puñado de fieles.
El odio religioso que muestra la masacre es sin embargo más propio de los grupos yihadistas que operan en el nordeste de Nigeria, en particular el más sanguinario, Boko Haram, que trata de amedrentar así a las poblaciones cristianas para que huyan antes de proclamar un ‘califato’ en ese territorio.
Esta ola de violencia solo refleja la realidad que estamos viviendo, el odio, desprecio que sienten unos humanos hacia otros, la falta de valores, de empatía y respeto que existe en la sociedad, cada día se vuelve más recurrente este tipo de ataques que no deberían pasar, sin embargo tenemos que sobrevivir a ello.
Reflexionemos ¿Qué estamos haciendo del mundo y sobre todos de las nuevas generaciones?
